Café or not Café
Es el tiempo del café. Si no era nuestro hábito antes de la pandemia, ahora nos vemos en esta duda existencial, tomar o no tomar café.
Pasamos horas frente al computador u observando por la ventana el lento paso de las horas, eso en el papel, porque hay miles de cosas que realizar, entre todas, el trabajo es la que más nos exige; porque tenemos que estar activos en una situación excepcional, más aún cuando nuestra comuna o ciudad está en cuarentena.
Entonces, aun cuando el café sea una tentación, comúnmente nos rendimos a sus grandiosos atributos, lo dice alguien que sí lo disfruta y cuyos efectos son irresistibles.
Mejora nuestra concentración, nos activa y aleja las temibles almohadas, cuando éstas nos tientan a deshora.
Por sobre todo, nos estimula a realizar múltiples tareas, ya que baja los niveles de adenosina, “la cual es un neuromodulador que produce efectos inhibitorios, tanto en el sistema nervioso central como periférico, por lo cual el antagonismo que ejerce la cafeína sobre este modulador produce, generalmente, efectos estimulantes”.
Buen humor
La cafeína también activa la dopamina, con lo que nos sentimos de mejor humor. Esta es una de las denominadas hormonas de la felicidad, en conjunto con la endorfina, serotonina y oxitocina.
Horario recomendado
Desde las 8 a las 9 am, entre las 13 y 14 pm y desde las 17, 30 a 18,30 no lo necesitamos, dicen los expertos, porque la hormona cortisol (hormona del estrés) está en su peak de altura, pero luego baja y nos volvemos a preguntar si tomar o no nuevamente (ver estudio).
Si añadimos cafeína cuando el cortisol está alto, lo que ocurre es que los efectos de las dos sustancias se superponen, porque las dos cosas sirven para despertarnos.
Tomo Café, luego existo.
El título de este artículo viene de Hamlet, aunque Descartes nos da material también para vincular el café a la filosofía. Es un infaltable aliado de las largas conversaciones y de los juegos de mesa como el ajedrez. Nos incentiva a lograr lo imposible, en el pensar y filosofar, sobretodo en el trabajo.
Efectivamente, tiene ese efecto, nos mantiene alertas y motivados. En estos días de claustro obligado, es un amigo que siempre invitamos a nuestras mesas.
El filósofo Voltaire tomaba más de 60 tazas al día según sus biógrafos y tuvo una prolífica obra que perdura hasta hoy.
Protege nuestro cerebro
El otro efecto beneficioso de la cafeína es sobre el cerebro. Además de aumentar la alerta, la cafeína tiene propiedades neuroprotectoras, y se ha visto que mejora el rendimiento cogniCativo en personas mayores. En este caso, los efectos se vieron con el café, pero no con la cafeína pura, lo que indica que hay otros compuestos en el brebaje que también colaboran.
¿Te puedes resistir a sus atributos?
Es muy difícil resistirnos ante tantos atributos, sólo mencionamos algunos.
Desde su descubrimiento no cesa de sorprendernos con sus beneficios. Los árboles del café tienen su origen en Etiopía, de acuerdo a la literatura especializada, hasta que llegó a Europa y América en el S XVII.
Existen distintas variedades dependiendo de su lugar de origen, clima, entre otros.
Estas variedades se disfrutan aún más cuando es un café fresco, tal como las variedades de Daroma, los cuales conservan gran parte de sus cualidades, por ejemplo, el aroma y el sabor.
¿Por qué Daroma?
Porque Daroma importa el café desde sus lugares de origen y lo procesan en Chile, además, con su sistema de tostado al aire es aún más fresco, con mejor aroma y sabor.
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Otros beneficios:
